ESCUELA AGROINDUSTRIAL

Este programa busca que las personas que tiene al campo con la fuente de generación de sus ingresos se eduquen en programas agro-industrial, para que aprendan no solo a darle valor agregado a sus productos, sino que le generen valor a través de procesos agroindustriales como productos terminados y vean en el campo una buena fuente negadora de ingresos.

Este programa educativo puede ser el impulsador del revolucionario programa de « La Escuela de Emprendimiento Agro+industria APL«, programa creado por la Federación FENAGRO APL, para incorporarle al campo la pertinencia educativa y conducencia agroindustria, es decir para impartirle al agro colombiano una educación en emprendimiento agro-industrial, que permita generar valor agregado, y posteriormente crearle valor agregado como lo vienen realizando otros estados, para su mejor compresión; se genera valor agregado cuando son productos exóticos que por sí solo ya son muy promisorios comercialmente y generan buenos ingresos económicos; y se crearle valor agregado cuando son productos que tiene alta bondades adicionales o se le da una innovación comercial que agregar valor al producto comercialmente.

Ahora, desde el campo económico; los productos promisorios son producto que posee grandes bondades alimenticias para la salud, por lo que se potencializa como producto como una gran oportunidad en el mercado nacional e internacional, por cuanto una vez sea conocido sus beneficios; su demanda no podría ser cubierta por la escasez de cultivos, lo que lo convierte en producto generadores de empleo, la productividad y la competitividad e integrador de los diferentes sectores agro e industria, e incluyente de la Educación en Emprendimiento Agro-Industrial, siendo la educación en emprendimiento el Canal generador de la innovación y competitividad frente a los tratados de libre comercio, que permita consolidar la integración (social, económica, política y educativa), y promover la filosofía de la responsabilidad social (educación del ser, saber y el saber hacer), la responsabilidad económica, empresarial y ambiental, el emprendimiento social, el empleo, la productividad y la competitividad del sector agropecuario e economía naranja, y la contribución o beneficios de las actividades que desarrolla esta, generando nuevas posibilidades de negocios de cooperación empresarial, que propenderá por el fortalecimiento de los vínculos entre los productores, las empresas y los consumidores y soluciones frente al posconflicto dentro de la tan anhelada paz de Colombia.